4 de octubre de 2009
AUSENCIA
Tu cuerpo mal colocado en la noche
somete hormigueros de insomnio
en tus ojos nada hay
toda nostalgia sobra.
Susurraste una pared, expandir equivocaciones,
cuando caigan confundidos rasurados
pasa la lengua por navajas que han buceado
órganos.
Me aleja de tu odio una cuchilla de afeitar.
Maltrata el vicio sin herirte,
el deseo que rastrilla una y otra vez su venganza.
Sangra esperar tanto.
Estoy vacunado contra ilusiones,
la estadía en ventanas con días grises mordiéndote la
frente.
Me romperé en el instante que me repita un ajeno.
La impaciencia tocará el timbre mientras desvisto
tus ojos para siempre,
el sueño que dejo regado, inconcluso.
Que multen por arrastrar hombros.
El dolor me ha sentado muchas veces
abollado el recuerdo de un loco que por vivir
continuaba sonrisas.
Pensamiento,
brinca distante de mí,
lúgubre como hojas ahogándose en un
nombre,
como cada vez que machacan suspiros,
enfangan palabras,
doblan el pasado que retoza con las ganas de llanto.
Son cuestionables tus posibilidades
no vengas a acurrucarte en mi mente.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario